Mi mente no encuentra su lugar. Anda divagando por todos los momentos que aun saltan, gritan y se revoltean en mi memoria.
Mis pensamientos no se alejan de la amargura de lo dicho por ti. No desean deshacerte ni siquiera por un instante, para reposar, para calmarse, y meditar acerca de tus intenciones.
No sé qué me has hecho, sinceramente no; aun no logro comprender cómo luego de tanta distancia, al inicio, llegar hasta donde hoy estoy de pie, observándote, contemplando el pasado y extrañando el futuro, incierto de por sí, pero al que suspiros y deseos de estar uno con al otro no le falta.
Qué será mejor, detenerse o seguir caminando? soñando? La pregunta da golpes terribles en mi mente, y mi cerebro ya no soporta más la maldición de tenerte alejada por más de un segundo; sin embargo, prefiero poco que nada, aunque no soy conformista, me conformaría con solo un roce de tus manos a mi cabeza!.
La vida está llena de momentos, positivos y negativos, grandes y pequeños, buenos y malos; pero solo Dios sabe la razón de haberme enviado un “ángel” a mi sueño, a caminar junto a mí por el pequeño, pero conmovedor, trecho que he caminado en los últimos momentos de mi vida, quizás a traer claridad a mi existencia? A darle paz y felicidad a mi vida? Sí, eso lo tengo por seguro; pero algo más que eso? Quizás!... (El destino lo dirá)... y sigo durmiendo, y lo seguiré haciendo hasta que tú lo desees, y aun cuando decidas hacerlo, quedará para siempre en mi memoria tan grato sueño, tan maravillosa sensación!!. Inolvidable entre lo más Inolvidable que pudiese existir!!. Pena que cuando despierte, aun estando entre sueños, me veré entre la soledad de la distancia, entre la amargura y la desdicha!!.
Al final solo quedará agradecer a Dios cada día por haberme regalado el placer, la alegría, y la fortuna de haberte tenido en mi sueño, en mis brazos, junto a mí; y haber compartido los lindos momentos que juntos disfrutamos!!!!.
Y esperaré que, en mi “otra vida”, si la llegase a haber, estés disponible para volver a vivir, junto a mí, una eternidad…
Mis pensamientos no se alejan de la amargura de lo dicho por ti. No desean deshacerte ni siquiera por un instante, para reposar, para calmarse, y meditar acerca de tus intenciones.
No sé qué me has hecho, sinceramente no; aun no logro comprender cómo luego de tanta distancia, al inicio, llegar hasta donde hoy estoy de pie, observándote, contemplando el pasado y extrañando el futuro, incierto de por sí, pero al que suspiros y deseos de estar uno con al otro no le falta.
Qué será mejor, detenerse o seguir caminando? soñando? La pregunta da golpes terribles en mi mente, y mi cerebro ya no soporta más la maldición de tenerte alejada por más de un segundo; sin embargo, prefiero poco que nada, aunque no soy conformista, me conformaría con solo un roce de tus manos a mi cabeza!.
La vida está llena de momentos, positivos y negativos, grandes y pequeños, buenos y malos; pero solo Dios sabe la razón de haberme enviado un “ángel” a mi sueño, a caminar junto a mí por el pequeño, pero conmovedor, trecho que he caminado en los últimos momentos de mi vida, quizás a traer claridad a mi existencia? A darle paz y felicidad a mi vida? Sí, eso lo tengo por seguro; pero algo más que eso? Quizás!... (El destino lo dirá)... y sigo durmiendo, y lo seguiré haciendo hasta que tú lo desees, y aun cuando decidas hacerlo, quedará para siempre en mi memoria tan grato sueño, tan maravillosa sensación!!. Inolvidable entre lo más Inolvidable que pudiese existir!!. Pena que cuando despierte, aun estando entre sueños, me veré entre la soledad de la distancia, entre la amargura y la desdicha!!.
Al final solo quedará agradecer a Dios cada día por haberme regalado el placer, la alegría, y la fortuna de haberte tenido en mi sueño, en mis brazos, junto a mí; y haber compartido los lindos momentos que juntos disfrutamos!!!!.
Y esperaré que, en mi “otra vida”, si la llegase a haber, estés disponible para volver a vivir, junto a mí, una eternidad…
